viernes, 12 de octubre de 2012


KNORR

            El Knorr o gruñido constituye el bajo de la canción del canario Roller. Su sonido se puede comparar con el gruñido de un cerdo o de un perro. Es el giro más fácil de reconocer. El knorr es una de las más bellas ruladas del repertorio del canario del Harz. Cuando es bien cantada produce una profunda impresión.

            La transcripción fonética de este giro es muy simple, ya que es la misma palabra que sirve para nombrarle: knorr, knorr, knorr... Las mejores vocales son o y u, otras vocales a, e son de menor valor, y pueden llegar a ser faltas si el sonido es agudo, nasal o plano. Las consonantes cuanto menos suenen mejor. Deben estar presentes pero sin que ahoguen el sonido de las vocales; si predominan las consonantes el sonido se vuelve duro y, en consecuencia, de poco valor. Para que un Knorr sea cantado correctamente, de una forma melodiosa, es necesario que se haga con el pico cerrado; si el canario abre el pico durante la emisión, el tono hueco y profundo desaparece y el giro pierde mucho de su valor.

            Formas del Knorr.

Al Knorr de forma rulada se le denomina Knorr rond o Knorr redondo. Esta forma de Knorr es la más común.

Cuando las consonantes casi desaparecen y se escucha sólo un sonido vocálico hueco y profundo de oo o uu estamos frente a un Hohlknorr, que es una de las formas más valiosas de este giro (muchos aficionados y jueces consideran que esta forma es la más valiosa). El Hohlknorr sólo se da en planteles de línea hueca muy seleccionados.

En ocasiones las sílabas del Knorr se abren o separan un poco, y entren o no otras consonantes, el giro se hace batido o golpeado, pero sin perder nunca su condición de grave y continuado o cerrado. La forma abierta o golpeada más frecuente es el Glucknorr. En esta forma las sílabas se separan y suele entrar una nueva consonante: la l; el sonido se hace batido pero también se consigue una gran gravedad y profundidad de tono. Hace años hubo grandes discusiones sobre la bondad o no del Glucknorr, llegándose a proponer que no se puntuase en caso de que el canario lo diese y todo ello porque este giro era una manifestación de la influencia del Gluck el cual había que desterrar a toda costa de los planteles de línea hueca aunque el Gluck fuese de calidad y hueco. Hoy en día se acepta plenamente y se considera su mérito cuando lo tiene.

Ha habido autores, que hace bastantes años, escribieron sobre la existencia de otras formas de Knorr, y hablaban del Schockelknorr y del Kollerknorr. Son formas que posiblemente existieron hace muchos años, cuando existían planteles de Koller y otros que tenían muy desarrollado el Schockel. Hoy en día no son más que recuerdos pues el Koller hace tiempo que desapareció y el Schockel se escucha muy raramente. El Schockelknorr tendría un carácter vibrante y golpeado por influencia del Schockel y el Kollerknorr sería muy hueco y profundo con un cierto carácter acuoso.

El Knorr no es una estrofa del canto del canario Roller debida al azar. Criar canarios que lo tengan bien desarrollado exige grandes conocimientos y cuidados. Sin convertirse en falta ni en penalizable, el knorr degenera fácilmente y el criador deberá cuidar especialmente los cruzamientos, seleccionar a los reproductores con mucho cuidado y dedicarse a la educación de los jóvenes con método y seriedad.

Valoración.

El Knorre normal  hasta 21 puntos.

El glucknorre hasta 21 puntos.

El Hohlknorre desde 21 hasta 27 puntos.

                                                                                             Ángel Rodríguez Cardeña

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